Mirar lo que ha quedado de mi antiguo contenedor de la basura.El caso es que pensé que me era suficiente para tirar todo lo que quería tirar, pero no lo fue.
La vida sigue, y con ella, la basura se va acumulando sin darte ni cuenta.
Cuando piensas que todo está limpio y bien aseado, aparecen cosas con las que no contabas.
Así que he ido a comprar uno nuevo y reluciente y se va a llenar de nuevo aunque no me guste la idea. Yo esperaba no necesitarlo mas, pero me pasó como a mi tumbona, que cuando le di el finiquito, la tuve que sustituir por otra nueva.
Mañana tengo que estrenarlo ya. Y espero hacerlo con el dolor de los míos, de los que quiero, que tanto sufren en estos momentos.
Después, seguirá ahí, tanto para mi, como para vosotros si deseáis utilizarlo para algo. Ya sabéis que este blog es libre, libre como las gaviotas y así lo seguirá siendo.
Y los que aquí estamos somos libres, por eso estamos aquí, tan libres que dejamos pedacitos de nuestros sentimientos cuando queremos. Otras veces, quizás sean los sentimientos de los demás los que aquí se queden...
No dejemos que nadie ni nada nos corte las alas... NADIE se merece pizquita de nuestro dolor, aunque viva en nosotros. Nos pertenece...es NUESTRO, de nadie mas.
Tú, que nos lees... tú que entras en este blog...también te cedo el contenedor para que tires tu basura, esa que tanto te molesta o que, incluso no te deja ser feliz.
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