lunes, 15 de febrero de 2010

GRACIAS ALEX


Siempre que te leo te lo pregunto.
Porque un día tú me lo dijiste que había un sitio, cuando yo quise saber.
Desde esa busco y busco sin parar. He ido al mar, pero este no me da palabras, solo sentimientos que me invitan...nos conocemos tan bien que ya lo sabemos los dos todo el uno del otro y cuando nos buscamos, nos llamamos, los sentimientos y sensaciones siempre son las mismos, así que ahí no es el sitio.
Miré el agua de la lluvia mientras corría por el camino, y tampoco me dijo nada.
Busqué en mi terraza, mientras, descalza, camino sobre mis lágrimas, y tampoco estaba.
He recorrido montes, he llegado a ríos... y hoy he llegado a uno. Lo he encontrado sin darme cuenta en medio de mis fotos de búsqueda. Pero tampoco es este, pues no me ha dicho mas que lo que había, piedra a su alrededor y agua esperando que el sol la evapore.
Hoy te he leído otra vez y te lo he vuelto a preguntar: ¿dónde está el manantial al que acudes a buscar esas palabras?. Y tú me has dado la respuesta que por fin me ha hecho comprender el porqué yo no lo encontraba. Me has dicho;"Esté en mi cabeza, está en mi corazón, en mi alma".
Y ahí, en mi cabeza y en mi corazón no esta ese manantial, no, ahí solo tengo ese pequeños charco en medio de la piedra esperando ser evaporado por el sol.
Y ayer me hacía una falta especial, si, para que no me pasara todo el día durmiendo, esperando que las horas lo comiesen, que se acabase de una vez, que se lo llevase el viento, como se ha llevado otras cosas en mi vida.
Ayer lo necesitaba, pero...¿sabes?. Tú me has ayudado al final del día a ver un poco diferente, con esas palabras encontradas en el manantial de tu cabeza, de tu corazón, de tu alma, donde hoy me has dicho que están.
Ahora, ¿ seguiré buscando, como busco mi unicornio azul, que seguramente bebe de ese manantial de dónde surge esa magia con la que tú juegas tan bien?. Con esa magia que hace que cierre los ojos, mientras alguien te lee y me haga sonreír.
Con esa magia que en mi cabeza y mi corazón no es capaz de florecer por mucho que lo intente.
No es capaz de hacer que mis sentimientos positivos, mi alegría, mi esperanza, mis ganas de vivir, lleguen a mis dedos y estes lo sepan expresar como tú lo haces.
Quizás es que aún no ha llegado el momento o quizás, no habrá nunca ese momento y me tenga que conformar con mi charco en medio de la piedra.
O quizás sea lo mejor...el aislamiento mientras se espera desaparecer bajo los rayos del sol.
O quizás...¿qué mas da?. Igual hasta dejo de buscar, si, dejaré de buscar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si dejas de buscar, si te rindes, eso significa que tu búsqueda no era verdadera.

En cualquier caso no quieras ser como son otras personas y trata de ser tú misma, con tus defectos y tus virtudes.