lunes, 29 de agosto de 2011

ME SABE A NUEVO




Me sabe a nuevo cada vez que tus brazos rodean mi cuerpo y me hacen sentir niña temblorosa.
Me sabe a nuevo cada caricia  aterciopelada, perfumada como pétalo de rosa en una mañana de rocío, rozando mi piel.
Me sabe a nuevo tus labios, que al besarme,  abren los míos vírgenes siempre para ti.
Me sabe a nuevo el juego de piel con piel, sobre piel, bajo piel, en el lecho cuando nos amamos.
Me sabe a nuevo tu mirada cuando te siento dentro, pidiéndome que sea tuya y cada vez soy  tuya, de nuevo.
Me sabe a nuevo cuando bailando dentro de mi, rompes el silencio de la noche con un "te quiero" que nunca espero y me sorprende como el primer " te quiero".
Me sabe a nuevo el cosquilleo de mi cuerpo cuando agotados de amarnos, reposamos a la espera de que me hagas sentir que todo es nuevo, cada vez nuevo, siempre nuevo.

Foto: Alba

miércoles, 24 de agosto de 2011

TAN SOLO UNA MIRADA




Sabía que dentro de mi tenía un Núcleo-sueño  candente, abrasante, incendiario, ardiente ,envuelto en un Manto-escudo que lo aislaba del exterior protegiéndolo, presionándolo, encerrándolo, encarcelándolo para que no temiera, se sobrecogiera,  se espantara,  se amedrentara de una Litosfera-esperanza que capa a capa lo desnudaría, desampararía, descobijaría, debilitaría, hasta llegar a  la  Hidrósfila-ilusión que lo mecería entre mares, ríos, lagos, aguas subterráneas y ya habría freno para a ese osado sentimiento  que estallando se expandiría hacia la Atmósfera-vida donde ya nada podrá detener el viaje hacia el sol, la luna, las estrellas, cometas...


Un Núcleo, que con solo una mirada tuya, abrió brecha sobre el Manto que lo protegía y traspasó capa a capa la Litosfera dejándose mecer por una Hidrósfera que abrió puertas a ese sentimiento que estalló y se expandió por la Atmósfera hacia ese cielo que dándole vuelta, has puesto a mis pies.


Foto: Carmela

sábado, 20 de agosto de 2011

QUERIENDO ESCAPAR


Queriendo escapar puse horizonte, queriendo escapar de un nuevo mar de sensaciones, de sentimientos, que rompían furiosos haciéndome daño.
Estallaban en mi interior y un no saber, y un no querer ,invadían mi alma de dudas, de miedos incontrolables, hasta desear poner ese horizonte.
Queriendo escapar puse horizonte para no mirar tus ojos y desear la huida, al mismo tiempo que me envolvías en tules de mil colores, tantos como eses sentimientos que me desbordaban.
Y huí donde mis ojos no se encontraban con los tuyos, donde mis manos no te tocaban, donde tus besos no me quemaban... donde tú no estabas.

Ahora tengo horizonte, pero desesperada busco ese mar y busco tus ojos y busco el encuentro.
Ahora no quiero el horizonte, ahora te quiero a ti. 
Quiero nadar en tus aguas, envolverme en olas furiosas que rompan en tu orilla, acogiendo ese alma que quiso huir de sentimientos desconocidos.
Luchar contra la marea, contra tempestades, hasta conseguir que la calma llegue a nuestras vidas, pero pegada a ti, ojos con ojos, alma con alma, piel con piel.
Y es que descubrí que el horizonte hace más daño que la cercanía.

Foto: Carmela.

miércoles, 17 de agosto de 2011

SOÑANDO DE NOCHE



Esta noche soñé...
Mi cuerpo desnudo bajo las sábanas sintió tu dedo recorrer mi espalda lentamente.
Y sabes lo que me gusta tu dedo, cuando muy despacito, me acaricias toda; montañas... valles...cueva... esa cueva último recorrido, profunda cueva donde nacen las notas más fuertes de la canción que arrancas de mi boca.
Mi cuerpo es tu instrumento, mientras yo te acompaño con mi canto y nace la melodía.
Ahora tú dejas de tocarme y  es mi dedo el que recorre tu cuerpo, muy despacito, por valles...cueva...montaña, esa montaña ultimo recorrido, alta cima donde nacen las notas más fuertes de la canción que arranco de tu boca.
Tu cuerpo es mi instrumento, mientras tú me acompañas con tu canto y nace la melodía.
Esta noche soñé que sobre nuestro lecho bailaban mil notas y que al llegar al un prestíssimo deseo, estallaron  formando un arco iris que envolvió nuestros cuerpos hasta que los primero rayos de sol se colaron tras el horizonte.
Esta noche soñé...

domingo, 14 de agosto de 2011

INDECISIONES, PARÁLISIS.


Si miras al cielo, las ves siempre dirigirse hacia el este, el oeste, el norte, el sur... empujadas por el viento que les marca el camino a seguir, o la quietud de la espera.
Hoy miré hacia arriba y vi que no siempre es así. Hoy mi mar tranquilo, tan calmo que parecía espejo, reflejaba la lucha del no saber hacia donde ir, la indecisión de un sin fin de vientos que las manejaban a su antojo, mientras ellas, perdidas chocaban entre si, partiéndose en mil líneas, cúmulos sin orden ni sentido.
Y mientras las miraba absorta, desee que no sufrieran el dolor de la indecisión, que no se sintieran perdidas, que... no fueran humanas, asquerosamente humanas...

Pesa su cuerpo sobre la arena, que la piel parece papel de lija. Sus piernas puntales varados en la orilla de barco vencido, sus brazos ramas que el mar arrastra a lo orilla, su cabeza medusa tirada al sol por manos sin escrúpulos.
Pesa tanto su cuerpo que paralizado deja pasar las horas mientras cierra sus ojos dejándose llevar por el no estar, no sentir, no sufrir.
Me acerco sentándome a su lado; sé lo que necesita. 
Solo notar mi presencia y lloran sus ojos agua de mar, que humedece su cabeza medusa-muerta, sus brazos de ramas-secas y sus pies-puntales comienzan a moverse.
Ahora me mira suplicante y yo le abrazo con fuerza. Su cuerpo comienza a temblar y se deja acariciar.
Solo un abrazo, solo una caricia, solo un " estás" obran el milagro del querer desaparecer, al querer vivir.
Costó tan poco... tan poquito...

Foto: Carmela

lunes, 8 de agosto de 2011

NECESITO...



Necesito borrarte de mi piel, que tus manos queman sin tocarme.
Necesito borrarte de mis labios, que tus besos poseen los míos.
Necesito borrarte de mi cama, que tu aroma y calor siento a mi lado.
Necesito borrarte de mis sueños, donde eres el protagonista.
Necesito borrarte de mi pensamiento, en el que me acompañas todo el día.
Pero no hay otras manos que te borren de mi piel, ni otros besos de mis labios, ni otros cuerpos calientan mi cama, ni  más protagonistas en mis sueños, ni nadie me acompaña en mis pensamientos, a no ser tú.
Me sumergí en el mar de mis lágrimas buscando que él te borrara, pero quemaba como me quemas tú, y huí contigo pegado a mi.
Y es que aunque lo necesito, no lo consigo amor, porque no quiero borrarte, sino que traspases más allá mi piel, que tus besos me posean con más fuerza, que sea tu cuerpo el que caliente mi cama, que en mis sueños seas siempre el protagonista, y en mis pensamientos te quiero todo el día.
Necesito... te necesito, vida mía.


Para Fernando

Foto: Carmela

jueves, 4 de agosto de 2011

TRAS EL CRISTAL NUEVE


Como caracol guardó siempre su cuerpo, como caracol guardó siempre su alma.
Encerrada en concha acorazada vivió años plegada, miedosa a manos, miedosa a voces.
Miedosa desde que era niña y aquel hombre había violado su piel inocente, entre voces de engaño.
Llevó el lastre toda su vida, ese miedo que la aterrorizaba no la abandonó ni cuando movió un dedo y dejó un pequeño hueco a unas solas manos que durante años  no supieron entrar ni en su cuerpo, ni en su alma.
Manos de las que un día huyó, manos lejanas ya. Y plegó el dedo de nuevo, volviendo a formar esa concha acorazada más temerosa aún.


Deseaba vivir, deseaba perder el miedo a que alguien pudiese traspasar al menos una parte de si, y se abrió a una voz, pero no a unas manos.
Se entregó a una voz, dejó que la desnudara, que rompiera la coraza de su alma, pero no la de su cuerpo y fue feliz mientras duró, hasta que un día, esa voz la violó sin tocarla. Y ella huyó de nuevo, y ella reforzó su coraza de alma con barrotes de titanio.


Deseaba vivir, deseaba perder el miedo a que alguien pudiese traspasar su cuerpo, pero no su alma y se abrió a manos, pero no a una voz.
Y se dejó manosear, acariciar, dejó que su cuerpo fuese de manos, pero no de voces. Y se dio cuenta de que así no era feliz, mientras perdida, nada llenaba el vacío que sentía, que la dominaba
.
Llego sin darse cuenta, sin pensarlo, sin buscarlo. Llegó unas manos que abrieron su cuerpo, llegó una voz que abrió su alma. Llegó sin apenas darse cuenta y entre miedo y recelo dejó que penetrara las dos corazas infranqueables hasta ese momento.
Y se quedó desnuda por completo a manos y voz, y se entregó como a nadie hasta ese momento, dejando abiertos sus más ocultos recodos, de cuerpo, de alma.


Herida de muerte, tras un nuevo fracaso, ahora ya no es caracol, ahora ya su coraza no existe, ni tiene barrotes de titanio.
Ahora es sólo una masa informe, un  bolo de carne y sentimientos expuesta a quien quiera violarla de nuevo.
Ahora ya no es nada, ya no es nadie, ahora...será para quien quiera tenerla, pero que nunca la tendrá.
Ahora... bolo de carne...ya no deseos... ya no esperanzas...ya no vida...


Foto: Nélida