viernes, 18 de enero de 2013

A TI, AMOR




Te me escurriste de la piel arañándome toda.
Te quiero recordar con una sonrisa, pero nada borra las lágrimas que me causaste.
Eres sueño que acaba en pesadilla, eres ilusión que se esfuma como el humo
Por eso no quiero que vuelvas a mi, porque yo ya no te deseo.
Me acariciaste meloso, me abofeteaste cobarde.
Por ti la vida dejó de serlo, por ti la muerte fue un deseo.
Aléjate de mi, de mi vida no formas ya parte.
Por mucho que todos te vanaglorien, yo te desprecio y con eso me quedo.
Eres una enfermedad que desgarra las entrañas,
Eres basura que empodrece las almas.
Por eso yo no te quiero, sino que de ti reniego.
Pero mírame a la cara! No aceches como lobo buscando presa, que yo ya soy experta en esos lides del tira y afloja.
¿Pero dónde estás? Que no me quiero asustar… ¿ en dónde te encuentras? Dímelo que por mucho que doy vueltas, no soy capaz de ver esa faz que conmigo quiere jugar.
Esa faz que con cara de cordero pueda confundirme  y vuelva a sentir el cosquilleo presagio de un nueva historia feliz, que acabará en lágrimas de deshecho.
No me asustes, pues te temo.