viernes, 27 de noviembre de 2009

ELLA YA LO SABÍA


Ella ya lo sabía. Lo supo poco después de haberle conocido.
Aunque él no se diera cuenta, sus palabras descubrían sus deseos más intimos.
Y ella sabía ver más allá, donde poca gente sabe ver.
Y leyó en él, porque era meiga, y le llamaban así por algo.
Esa noche le buscó y entró en él, muy adentro y recorrieron trayecto en común.
Y entró porque quiso, entro libre y segura.
Y se elevaron, tocando el cielo juntos, perdiéndose entre nubes humedas.
Esa noche fue el comienzo o el fin, eso nadie lo sabía, eso ya no importaba.
Lo único importante es que habían caminado juntos, tan juntos, que ya tenían historia en común.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Seguro que esa noche en la tierra llovió y cayeron sobre ella las humedades de las nubes entre las que volabas.

Carmela dijo...

Esa noche no llovió. Esa noche bajaron despacio de las nubes y abrazándose, esperaron el amanecer, hasta que el sol acarició sus cuerpos.