De madera, de plástico, de galleta, acero, gelatina, espuma, cartón, cristal, grandes, pequeñas, medianas, rojas, amarillas, azules, verdes, negras, moradas, largas, estrechas, anchas, delgadas, gordas...
Todas sobre su mesa y ella dándole vueltas, con los huesos de los dedos al descubierto y las piezas ensangrentadas.
Las movía una y otra vez, día tras día , noche tras noche intentando encajarlas.
Así la encontró, sin comer, sin beber, sin lavarse, sin vestirse, sin vivir.
Se acercó y de un golpe tiro de la mesa aquella maraña imposible de casar. La limpió con un paño dejándola reluciente y sentándose cara ella la miró.
De aquellos ojos comenzaron a brotar lágrimas que iban cayendo sobre la mesa.
Sonriendole cogió una a una y las fue encajando..
- Sólo de ti depende el fin del puzzle, la última pieza.
5 comentarios:
Gracias...
Siempre hay alguien que nos echa una mano... en los momentos dificiles...
Besos
Verdad, más si no pones de ti mismo...su esfuerzo será en vano.
Gracias a ti por tu visita y comentario.
Un biquiño.
Si... al final...
"somos nosotros los que debemos decidir... y de los aciertos y sobre todo errores... aprender"
Mas besos...
Errores o experiencias?
No creo que sean errores, sino nuevas experiencias que cuando salen mal, les llamamos errores...fracasos.
Gracias pidobufi.
Un biquiño cual brisa marina en la mejilla.
La vida es un puzzle, y nuestro trabajo nos lleva encajar todas las piezas. Podremos equivocarnos, sufrir pero jamas darnos por vencidos, por que si hacemos eso, el puzzle no nos mostrara su estampa, seran recortes turbios de formas que buscan su lugar.
Un beso
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