Piedra inanimada del camino,
anclada en limitado espacio,
alivias al caminante agotado,
soporte de sus congojas,
sirvienta en el atardecer,
de mantenimiento necesario,
cama de musgo nacido,
cabecera del cansado,
blanda almohada se muestra,
en negras noches al raso,
compacta y pétrea emerges,
entre hiedras y cipreses,
de techo perenne quedas,
en morada que perdura,
en ría húmeda y redonda,
forma lecho donde muere,
pulcro de agua corriente,
en noche estrellada espejo,
entraña rugiente en monte,
arrullo que en gruta suene,
dejando filtrarse el agua,
por sus envejecidas sienes,
piedra arrogante y madura,
en el tiempo permaneces.
GUMIEL
Foto: Carmela
9 comentarios:
¡Qué versos tan vitales, tan rítmicos, surgidos de un objeto tan inanimado! Precioso.
Mis amigos son así vazquez, sacan oro de las piedras.
Yo quiero y no puedo :), pero los tengo a ellos y eso me hace feliz.
Un biquiño fermoso doncel.
muy, muy coherente pensamiento el tuyo. me encantas.
besos
Vamos a imitar a las piedras...!!! en estos tiempos que corren no estaría mal...encantada amiga de pasar por aquí..besicos
Y ¡es que tienen tanta vida las piedras, tanto que contarnos!
Tú lo has captado y nos lo cuentas maravillosamente.
Un beso.
Las piedras son un gran ejemplo para nosotros. A pesar de su fuerza nunca ofrecen resistencia. Y desvian los caminos a su antojo.
Muy bello.
Besos.
Gracias de parte de Gumiel, que la tenemos de vacaciones.
Como veis es una gran poetisa y amiga.
Un biquiño para todos.
Precioso Gumiel querida amiga, si hasta me gustaria ser una de esas piedras:-) besos linda.
Hola Carmela.....con toda "humildad"
me gustaría que retirases de rodar y volar la flor azul del poeta..te la ofrezco de corazón...mereces tenerla...la encontraras en rodar y volar al principio del bloc a la derecha....un abrazo amiga..
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