lunes, 14 de junio de 2010

LA VIEJA CASONA



Recorre las habitaciones de la vieja casona cual alma en pena.
No sabe lo que busca, lo que espera, ni el porqué allí se quedó encerrado.
Lo único que sabe es que no puede salir, que aquella casona guarda sus secretos desde tiempo inmemorables...tanto que ya ni se acuerda.
Le cuesta recordar como comenzó a construirla él mismo, pared a pared, cada división, cada mueble.
La primera era bonita,si, muy bonita, pintada con colores tenues, amueblada con delicadeza y su aroma era dulce, a jazmines en flor.
Pero tampoco se acuerda del porqué la abandonó, del porqué el miedo pudo con él, del porqué dejó de pisarla.
Ahora solo quedaba en ella sentimientos de frustraciones pasadas, de temores, de cobardía inconfesable.
Así fue construida cada estancia de aquella casona, con vivos sentimientos que encontraba en su camino de búsqueda, comenzando por ser bellas obras, y terminando como estancias viejas, polvorientas...
Al principio no se dio cuenta, hasta que un día miró atrás y después hacia adelante y se vio solo, muy solo.
Y comenzó a recorrerlas una a una, todos los días.
El deseo de comprender era tan grande que le comenzó a obsesionar de tal forma, que ya no pudo salir de allí.
Entraba, las observaba desde la puerta y sus ojos expresaban tristeza, mucha tristeza y falta de compresión hacia si mismo, hacia su obra.
Añora los momentos en los que sintió feliz posando ladrillo sobre ladrillo, tiempos en donde la sonrisa afloraba a su rostro cada día, mientras su obra avanzaba.


Lo que no sabe que es observado tras los viejos o rotos cristales de aquella casona por alguien que siente su dolor. Que le acompaña en su paseo todos los días desde la distancia,  pero que también se siente dentro.
No sabe que dejó bellos recuerdos en alguna parte de su pasado abandonado.
Solo sabe que todos los días, sus pasos la recorren buscando respuestas.

Foto: Carmela

5 comentarios:

Torcuato dijo...

Las casas van absorbiendo las vivencias dolorosas y alegres de las que son testigas. Esas vibraciones perduran y contagian a quien entra.

Un beso Carmela.

Unknown dijo...

Es una casa... que no es tal.
Es la vida que nos rodea. Las consecuencias de nuestros actos, de nuestras actitudes ante ella, las relaciones que tenemos con los demás...
Un sin fin de causas que la van formando.
Mi personaje vive en un mundo(casa), llena de frustraciones consecuentes de sus actos. Actos de los que aún no entiende o no es capaz de asumir y busca respuestas a ellos.
Pero por muchas equivocaciones que comentamos, siempre habrá alguien a nuestro lado apoyándonos aunque nosotros seamos incapaces de verlo.
No se si me explico bien...
Un biquiño Torcuato.

Anónimo dijo...

muy enigmático tu relato. me gusta ese intriga.
besos

Unknown dijo...

cuarta, te visitare.
Un saludo.

Unknown dijo...

relih, enimagnisima.
A mi también me gustan tus entradas, mucho mucho muchooooo
Un biquiño, ya sabes.